10 Consejos para no equivocarte al comprar vino

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­Comprar una botella de vino para una cena, una ocasión especial o simplemente para consumo personal, en principio puede parecer bastante fácil, hasta que nos encontramos frente a una estantería repleta de opciones, y empezamos a dudar exactamente que tipo de vino es el que estamos buscando. En la mayoría de las ocasiones, todos deseamos lo mismo: un vino que nos agrade, que cumpla unos requisitos de calidad, y si puede ser a buen precio, mejor.

Escogiendo un vinoFoto: Shutterstock

 

Si ponemos en práctica las siguientes consideraciones, minimizaremos el riesgo de equivocarnos, y conseguiremos sentirnos satisfechos con la botella de vino adquirida.

1. Considera los atributos de tus sabores preferidos

Pueden estar relacionados con las características de una variedad de uva en concreto, su origen, con la elaboración, su estructura, o el final que proporciona el vino. Una misma variedad, dependiendo del origen o proceso de vinificación, aportará distintos grados de aromas y notas. No es lo mismo un Chardonnay del Viejo Mundo que del Nuevo Mundo, o un Chardonnay con o sin crianza. Es conveniente conocer las diferentes gamas de estilos o de calidad que aporta la uva, dependiendo del origen y elaboración.

Sin embargo, existen otros factores que podemos considerar más relevantes que la variedad, como es la propia estructura del vino; más detectable y equilibrada en los buenos vinos, y su final; la persistencia de la textura y el gusto después de ingerir el vino. Factores determinantes para evaluar la calidad del mismo.

2. Ten en cuenta con qué comida lo vas a tomar

Una de las cuestiones esenciales con respecto al vino, es la del maridaje. Podemos conocer los consejos clásicos, pero antes de decidirnos por una botella de vino tinto, blanco, rosado...debemos saber qué tipo de comida armonizará, y dependiendo del plato que acompaña, elegir o dejarnos aconsejar por los profesionales.

3. Cuándo lo vamos a tomar

Seleccionar el vino en función de la ocasión nos ofrecerá diferentes criterios y expectativas de compra. Si es para consumo personal e inmediato, o para guardar y celebrar un evento en particular. Si se trata de un regalo para alguien especial o para compartir en una cena informal. Cada situación, puede requerir un tipo de vino distinto.

4. Un vino caro no siempre es un vino bueno

En ocasiones nos encontramos con el dilema del precio. Lo cierto, es que la mayoría de vinos excelentes pertenecen a la gama de precios premium y extremadamente caros, al igual que rara vez los mejores vinos del mundo los encontramos a precios económicos, aunque con frecuencia, algunos de los mejores vinos mantienen un precio medio. Por el contrario, algunos vinos a precios altos, tienen resultados mediocres. No siempre pagando más, encontraremos un vino mejor o alineado con la calidad esperada.

5. La importancia de la añada

Ni las mejores bodegas pueden garantizar y equiparar la calidad de una añada a otra, ya que esta, cambia según la época. Podemos tener buenos recuerdos de una determinada añada, y que difiera de la siguiente. Por lo tanto, no todas las añadas son igual de buenas. Otro aspecto a tener en cuenta es la añada en relación a los vinos jóvenes, recomendando su consumo preferiblemente en el año, para evitar que pierda su frescura y frutosidad. Son vinos que se encuentran en el mercado al año siguiente de la cosecha.

6. Acude a tiendas especializadas con profesionales del sector

Aproximarnos a nuestra tienda local y dejarnos asesorar por los profesionales, es garantía de satisfacción. Ellos están en constante formación y contacto con el sector, mantienen una firme rotación y cuidado de conservación del stock, en muchas ocasiones adquieren lo que les gusta pensando en la satisfacción del cliente y prevalece el trato personalizado. El asesoramiento, dedicación y ayuda de los profesionales, a través de una charla donde expongamos nuestros gustos, rechazos y formulemos nuestras preguntas, finalizará con una compra apropiada.

7. Prueba algo diferente cada vez

El descorche que ofrecen la mayoría de las tiendas especializadas, nos ayuda a experimentar y descubrir nuevas referencias de distintos orígenes, añadas e incluso precios. Es una excelente opción para conocer más sobre nuestros gustos, y sorprendernos al ampliar las posibilidades a la hora de poder elegir un vino u otro.

8. Busca un vino con la mínima intervención

Si la preocupación y la búsqueda acerca del origen de los alimentos y cómo se procesan, es un tema inquietante, podríamos preguntarnos lo mismo sobre la procedencia del vino. Cada vez son más los consumidores interesados en conocer la intervención y origen del viñedo como prioridad, más que en la satisfacción puntual que les pueda proporcionar los sabores del vino. Sus etiquetas no reflejan ni los aditivos ni su cantidad. Cualquier profesional, podrá ofrecer como alternativa a los vinos convencionales, referencias con menos intervención, orgánicas, ecológicas o biodinámicas como opción.

9. Consulta en Internet

Seleccionar unas cuantas páginas especializadas en vino por Internet nos ayudará a contrastar e indagar sobre la calidad, precios y características en nuestra futura selección de vino. Si el inglés no es un problema, Wine Searcher es una buena referencia ya que encontraremos notas de cata, puntuaciones, precios, así como detalles más técnicos sobre una gran cantidad de vinos. Una búsqueda previa desde nuestro teléfono móvil nos evitará cometer errores y nos ayudará a acertar en nuestra decisión final. Toda esta información puede ser de gran utilidad para extraer nuestras propias conclusiones sobre lo que estamos buscando.

10. El estado de la botella

Determinados factores, como la ubicación de la botella en un escaparate, su exposición al calor y a la luz del sol, o el polvo situado sobre ella, no sólo ofrece una mala imagen del vino por la falta de cuidado del mismo, también nos puede alertar de su repercusión en el estado del producto. Adquirir una botella expuesta a uno de estos factores supone correr un riesgo innecesario. 

Conclusión

Conocer los criterios que influyen en la selección del vino que adquirimos te ayudará a hora de seleccionar la mejor opción. Si pones en práctica estas consideraciones, minimizaras el riesgo de equivocarte, y conseguiras quedarte satisfecho con la botella que termines eligiendo.

¿Tú cómo decides el vino que compras? ¿Utilizas siempre los mismos criterios? ¿O depende del momento? Déjanos tu respuesta en los comentarios.

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